Salou ha modificado este año su ordenanza municipal y endurece las sanciones a terrazas y establecimientos que incumplan la normativa actual.
El Ayuntamiento de Salou ha aprobado este año una modificación en la ordenanza municipal que regula las zonas de retranqueo vinculadas a locales comerciales. Esta normativa, que afecta especialmente a espacios de restauración y comercios que ocupan parte de la vía pública, ya se había implantado el año pasado, pero el consistorio ha detectado la necesidad de corregir problemas en su aplicación e interpretación.
Una de las principales novedades es que se sancionará con contundencia a los establecimientos que instalen aparatos musicales o de cocina en las terrazas. Así se detalla en el Plan Normativo Municipal para 2025, que contempla multas importantes, regidas por la Ley de Urbanismo de Catalunya: hasta 150.000 euros en casos graves y 3.000 euros en infracciones leves.
Entre las infracciones consideradas leves, figuran situaciones como: sobrepasar el espacio de terraza autorizado, instalar más elementos de los permitidos, colocar toldos o pérgolas más altos de lo establecido, usar expositores de más de 1,7 metros de altura o dificultar el paso de peatones.
En cuanto a las sanciones graves, se incluye la instalación de elementos de cocina, salidas de humo o cualquier equipamiento que represente un peligro para las personas o el entorno. También se controlará especialmente la contaminación acústica, lumínica o los riesgos por incumplir medidas de prevención de incendios. No estará permitido, por ejemplo, el uso de altavoces o televisores con el volumen elevado en terrazas situadas junto a la vía pública.
Por otra parte, la normativa también introduce aspectos más permisivos, como permitir el uso de toldos tipo B (con soporte fijo), bajo los cuales se podrán instalar aparatos deportivos, recreativos o infantiles, siempre que cumplan con límites de ruido, protección contra impactos y otras condiciones. Además, los comercios que deseen exponer productos fuera deberán hacerlo siempre bajo una pérgola o toldo adecuado.
Desde el Ayuntamiento se insiste en que esta regulación busca equilibrar la actividad económica con el bienestar de vecinos y turistas, en un contexto de alta afluencia durante los meses de verano.
Es positivo que se intenten regular ciertos aspectos del espacio público para mejorar la imagen y seguridad del municipio. Sin embargo, muchos ciudadanos de Salou se preguntan si estas normativas se aplican con la misma firmeza en todos los casos.
Bicicletas y patinetes circulando por las aceras, basura y trastos fuera de los contenedores, aceras levantadas por raíces de árboles, señalizaciones urbanas sucias, en mal estado o tramos peligrosos sin señalizar adecuadamente, son solo algunos ejemplos de situaciones cotidianas que también deterioran la imagen de Salou y que, en muchos casos, no reciben ni sanción ni solución.
La imagen de Salou no depende solo de controlar las terrazas u otro tipo de establecimientos: también requiere por parte del consistorio salouense mantenimiento, vigilancia y respuesta ante pequeñas cosas que afectan a diario a vecinos y visitantes. Y en ese sentido, aún queda trabajo por hacer.